Hombre Chileno 23 Años

Admisible

Relato de la querella

El día 21 de octubre de 2019, aproximadamente a las 21:00 horas, I.I.M.C., participaba de un cacerolazo que se realizaba en la vía pública, en un lugar cercano a su domicilio, ubicado en la comuna de San Pedro de la Paz.

Estando en esta manifestación, se escucharon disparos de personas que al parecer provenían de armas de fuego, en momentos que llega al lugar de la manifestación un piquete de Carabineros de Chile de la Sexta Comisaría de Carabineros de San Pedro de la Paz, que comienza a lanzar bombas lacrimógenas, provocando que todos comenzaran a correr. La víctima, en este contexto, no logra huir pues días antes había lesionado su pierna, logrando correr solo unos metros, quedando atrás del tumulto de gente. En esto, la víctima ve que atrás suyo viene un vehículo de carabineros del cual descienden cinco funcionarios, los que lo toman del cuello, lanzándolo al suelo, donde es agredido con golpes de puño y de bastones de servicio en diferentes partes del cuerpo. A continuación, lo suben al vehículo y se sienta un funcionario de carabineros a cada lado, además del copiloto y el chofer.

En trayecto, los funcionarios comienzan a exigirle que debe decirles quiénes eran los que andaban disparando, con expresiones tales como “perro culiao, concha tu madre, hijo de puta, hijo de perra, tú sabes quienes dispararon, dime quiénes fueron” cuando la víctima responde que no sabe quiénes fueron, los funcionarios lo continúan golpeando, mientras el copiloto en voz alta dice “no!, si este sabe quién fue, éste es de los mismos de los natres”.

Cuando llegan al exterior de la Sexta Comisaría de San Pedro de la Paz, uno de los funcionarios dice en voz alta “éste fue el que disparó” y aproximadamente treinta funcionarios lo comienzan a agredir, con golpes de bastón de servicio y puños, por lo que la víctima intentaba agachar su cabeza, para no recibir golpes de su rostro, sin embargo, uno de los funcionarios le levanta la cabeza para continuar propinándole golpes, mientras le gritaban expresiones tales como “te vamos a matar concha tu madre”. A continuación, funcionarios policiales lo ahorcan y se desmaya, por lo que la víctima pierde el conocimiento y lo recupera mientras lo están arrastrando para ingresarlo a la comisaría.

Estando en el interior de la comisaría, un carabinero se sube encima de su cuerpo, y lo golpea en la cara con golpes de puño, teniendo un anillo en el dedo. A continuación, es agredido con golpes en diversas partes del cuerpo. Insisten en señalarle que si les dice quien había sido la persona que había disparado, podría irse para su casa, pero la víctima respondía que no sabía nada, entonces continúan golpeándolo en diversas partes del cuerpo, provocando que la víctima se desmaye por segunda vez, además de vomitar.

Finalmente le dicen que se vaya a lavar la cara, porque estaba sangrando, lo suben a un vehículo policial y lo trasladan a constatar lesiones, en el trayecto lo amenazaban diciéndole que si dice que le pegaron “te vamos a matar, te vamos a ir a tirar a la playa”. En el centro de salud, cuando personal médico le pregunta el origen de las lesiones, un funcionario que previamente lo había amenazado se encontraba frente a él, mirándolo fijamente y desafiante, por lo que la víctima, por miedo, le dice a la persona que lo examina que se cayó, lo que provoca que el carabinero que estaba frente a él, le sonría.

De regreso, la víctima le habla a uno los funcionarios, le dice “usted me dijo que no dijera que me pegaron y eso hice”, a lo que el funcionario le responde “te vamos a cargar con unos cartuchos no más para que no te salga tan pesado”.