Hombre Chileno 26 Años

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  • Institución del querellado
  • Carabineros
  • Delito investigado
  • Tortura
  • Lugar del evento
  • Ñuñoa
  • Fecha del evento
  • 21-10-2019, 20:45 hrs.

Relato de la querella

En el contexto del Estado de Excepción Constitucional decretado por el Gobierno, el día 21 de octubre de 2019, aproximadamente a las 20:45 horas, en los alrededores del Estadio Nacional, específicamente en Av. Pedro de Valdivia con Av. Guillermo Mann, I.G.C., se encontraba caminando con varios conocidos, en un grupo de aproximadamente 30 personas, por Av. Pedro de Valdivia hacia el sur para llegar a sus hogares, ya que a esa hora no había transporte público.

Llegando a la esquina de Guillermo Mann, se dio cuenta de que había una barricada, y al mismo tiempo, a una distancia de unos 150 metros por su espalda, venía una furgoneta con funcionarios de Fuerzas Especiales de Carabineros de Chile, un carro lanza agua, unos motoristas de la misma institución, y un grupo de no más de 5 militares que custodiaban los alrededores del Estadio Nacional. quedando él y el grupo de personas entre los funcionarios estatales, y la barricada.

En esos momentos, desde la furgoneta fue lanzada una cantidad indeterminada de bombas con gases lacrimógenos hacia la barricada y el carro lanza aguas comenzó a lanzar agua hacia los caminantes, mientras el furgón de carabineros y los motoristas comenzaron a perseguirlos. En este contexto, I.G. fue detenido por 3 motoristas, quienes lo lanzaron al suelo y una vez esposado, uno de los funcionarios puso su pie sobre su cabeza mientras los otros funcionarios comenzaron a golpearlos en diferentes partes del cuerpo, con puntapiés. Todo fue observado por un vecino, quien increpó a los funcionarios.

Ya detenido, fue trasladado en un furgón policial hasta la 33° Comisaría de Ñuñoa, en donde fue ingresado a un calabozo. Inmediatamente, uno de los funcionarios que lo detuvo le gritó “voh fuiste el que me botó” y comenzó a agredirlo con golpes de puño en el rostro, azotando su cabeza contra un muro, dándole patadas en las costillas y tórax, en las piernas y en la entrepierna, mientras se encontraba esposado, sumándose otro funcionario a la golpiza, asfixiándolo; todo hasta que llegó un grupo de abogados, quienes vieron el estado en el que encontraba y le tomaron fotografías que se adjuntan en otrosí de la esta presentación. Posteriormente, fue llevado a constatar lesiones a un lugar que desconoce, vuelto a la misma Comisaría para después ser pasado a control de detención.