Institución del querellado
Delito investigado
Lugar del evento
Fecha del evento
Relato de la querella
El día 21 de noviembre de 2019, a las 18:00 horas aproximadamente, K.N.D.C. se encontraba en la intersección de Avenida Vicuña Mackenna con Avenida Libertador Bernardo O’Higgins, comuna de Providencia, ayudando a las personas que estaban afectadas por los gases lacrimógenos, proporcionándoles agua con bicarbonato.
En ese contexto, la víctima se posicionó en el paradero de buses ubicado frente a la Estación de Metro Baquedano en Avenida Vicuña Mackenna, vereda oriente, instante en que arribó un cañón de agua de Carabineros para disuadir a los manifestantes. El líquido expulsado alcanzó a una persona, botándolo al suelo, por lo que K.N.D.C. acudió a auxiliarlo.
Mientras estaba asistiendo a la persona, él también fue alcanzado por un chorro que fue disparado directamente hacia él, desde un cañón de agua que estaba a una distancia aproximada de 15 metros. La víctima intentó ponerse de pie y, mientras estaba todavía arrodillado, recibió una fuerte agresión en su cabeza, mediante golpe con bastón de servicio por parte de dos Carabineros de Fuerzas Especiales que no tenían identificación y estaban con pasamontañas. En este acto, dichos funcionarios lo detuvieron, arrastrándolo hasta ingresarlo al interior del bus de detenidos de Carabineros.
Al interior de dicho vehículo, un funcionario identificado como el Cabo 1° F.H., lo amenazó diciéndole “ahora sabrán lo que es sufrir”, “te tenemos grabado consumiendo drogas”, “te vamos a tener una semana entera, no te daremos de comer”. La víctima, mareado y aturdido producto del golpe, no respondió y fue trasladado a la 3° Comisaría de Santiago, por haber cometido supuestamente el delito de desórdenes.
Luego, lo llevaron al Hospital de Urgencia Asistencia Pública, ex Posta Central, donde le constataron lesiones y le suturaron la cabeza con 15 puntos. Posteriormente, lo llevaron de vuelta a la 3º Comisaría de Santiago, donde le pidieron firmar unos papeles. La víctima se negó, alegando que no se cumplieron los protocolos y, por otra parte, no le permitieron quedarse con el dato de atención de urgencia. Luego de ello, fue puesto en libertad.
Producto de las agresiones señaladas anteriormente, la víctima resultó con hematomas en los dos brazos, cadera y muslo derecho, además del mencionado corte en su cabeza, cuyos puntos fueron retirados 10 días después.
Por último, es menester señalar que la víctima mantiene una cicatriz en la zona de la cabeza y siente temor hacia funcionarios de Carabineros, especialmente a ser agredido al participar de una manifestación.