Institución del querellado
Delito investigado
Lugar del evento
Fecha del evento
Relato de la querella
El día 15 de noviembre de 2019 alrededor de las 19:30, la víctima, R.A.M.M., circulaba por la Avenida Libertador Bernardo O´Higgins en dirección a Plaza Baquedano, específicamente, caminaba por la calzada sur de la Alameda a la altura de la calle Ramon Corbalán, momentos en que observó que, por la Alameda desde el oriente, se acercaba al lugar un carro lanza gases y un carro lanza aguas, junto a un piquete de carabineros que comenzaron a disparar sus carabinas lanza gases en contra de las personas que se manifestaban en el lugar.
En este contexto, la víctima fue alcanzada por el chorro del carro lanza aguas, quedando completamente empapado, razón por la cual intentó salir del lugar, pero fue impactado por dos proyectiles de perdigón, disparados por funcionarios policiales a no más de 10 metros de distancia, uno de ellos afectó su zona glútea y el otro se le incrustó en la zona abdominal.
Luego de la agresión, la víctima salió del lugar, aún en estado de shock, tomó contacto con un amigo, quien lo acompañó hasta su domicilio, en la comuna de Peñaflor, a bordo de un vehículo particular que consiguió por la aplicación DIDI. Aproximadamente a las 21 horas, se dirigió a la urgencia del hospital de Peñaflor, pero no esperó su turno de atención, debido a que le indicaron que debía esperar varias horas para ser atendido y en el lugar no realizan radiografías.
Al día siguiente, el 16 de noviembre de 2019, la víctima concurrió al Hospital de Talagante, lugar en donde le tomaron radiografías y confirmaron que mantenía 2 heridas causadas por perdigón, una en la zona abdominal, sin ingreso de proyectil y otra en la zona glútea, cuyo perdigón se mantenía alojado en el lugar. Luego de la atención, se le señaló que el perdigón debía ser expulsado de manera natural y se le indicó antibióticos orales.
Finalmente, el día 21 de noviembre de 2019, R.A.M.M., concurrió al Hospital del Profesor, ya que presentó un fuerte dolor en la zona de la costilla, en donde le recetan medicamentos para aliviar la molestia. Hasta el día de hoy, la víctima presenta dolor punzante en la zona impactada por los perdigones y siente temor cada vez que se encuentra con funcionarios de carabineros.