Hombre Chileno 42 Años

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  • Institución del querellado
  • Carabineros
  • Delito investigado
  • Violencia innecesaria con resultado de lesiones graves
  • Lugar del evento
  • Santiago
  • Fecha del evento
  • 12-11-2019, 19:30 hrs.

Relato de la querella

El día 12 de noviembre del año 2019 la víctima S., luego de finalizada su jornada laboral, concurrió, junto a su pareja a las inmediaciones de Plaza Italia, con el objetivo de manifestarse pacíficamente. Llegaron alrededor de las 18:00 horas aproximadamente y se sumaron a las personas que se encontraban protestando en el lugar. A las 19:00 horas, su pareja le comentó que debía recoger a su hijo, por lo que se retiraría del lugar, pero que él continuara en la manifestación. En razón de lo anterior, don S. continuó manifestándose sólo, y se acercó a la calle Irene Morales con Avenida Libertador Bernardo O´Higgins en la comuna de Santiago.

A las 19:30 horas aproximadamente don S. observó a un piquete de Carabineros posicionarse en línea recta y comenzar a disparar indiscriminadamente en contra de las personas que se encontraban en el sector, desde aproximadamente 10 metros de distancia desde el lugar en el que él se encontraba. En ese contexto don S. sintió que un perdigón impactaba el párpado de su ojo derecho. La víctima refiere que sufrió un intenso dolor y que inmediatamente fue socorrido por voluntarios/as de la Cruz Roja, quienes le extrajeron el perdigón que se encontraba incrustado superficialmente en su ojo. Don S. recuerda que, mientras las personas de la Cruz Roja intentaban atenderlo, los Carabineros se encontraban alrededor disparando perdigones con sus escopetas antidisturbios, así como también arrojando agua con el carro lanza agua y químicos con sus carros lanza gases, lo que dificultaba considerablemente la labor de rescate.

Luego, los brigadistas subieron a don S. a una camilla y lo trasladaron hasta la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH). En ese momento, su ojo derecho estaba muy inflamado y de un color negro. En la FECH, los estudiantes y voluntarios examinaron a don S. y decidieron trasladarlo hasta la Urgencia del Hospital del Salvador. Sin embargo, una vez que llegaron al Hospital, don S. fue informado de que la Unidad de Trauma Ocular del Salvador no estaba atendiendo pacientes, por lo que debía retirarse sin recibir atención médica alguna, aun cuando su ojo sangraba incesantemente. Luego, los acompañantes de don S. lo devolvieron a la FECH y allí tomaron la decisión de trasladarlo nuevamente a la urgencia del Hospital del Salvador, pero esta vez fue trasladado en ambulancia con los paramédicos del Hospital.

Una vez ingresado en el Hospital don S. comenzó a sentirse muy enfermo. Experimentó vómitos y mareos y tuvo que pedir al personal médico que lo atendieran urgentemente, pues su salud estaba complicada. Luego los médicos informaron a don Jorge que mantenía un trauma ocular como consecuencia del impacto de un perdigón, sin embargo, no podían entregarle un diagnóstico más acabado y lo dieron de alta alrededor de las 4:00 am.

Al día siguiente, don S. asistió a la Unidad de Trauma Ocular del Hospital del Salvador, donde nuevamente no pudieron entregarle un diagnóstico certero en relación con su visión pues su globo ocular permanecía con demasiada sangre. En el dato de atención de urgencia los médicos consignaron lo siguiente: “Impacto de perdigón en OD (ayer pm) (…) agudeza visual OD mm+-40, agudeza visual OI 0.8p”.

Posteriormente, don S. debió asistir regularmente a controles en la Unidad de Trauma Ocular del Salvador, en una primera instancia diariamente y luego dos veces a la semana disminuyendo periódicamente. En el mes de marzo del año 2020 don S. se vio imposibilitado de continuar con los controles por la pandemia de COVID 19, pues la víctima refiere que, la unidad de trauma ocular del Hospital del Salvador se encuentra atendiendo únicamente los casos de mayor gravedad.

En cuanto al diagnóstico médico aún no hay certezas, sin embargo la víctima refiere haber sido informada de haber sufrido principio de cataratas y desprendimiento de iris, lo que le provoca una dilatación de pupilas que le impide observar correctamente. Finalmente, don S. indica que actualmente mantiene tan sólo un 50% de visibilidad en su ojo derecho.