Mujer Chilena 22 Años

Admisible

Relato de la querella

El día 21 de octubre de 2019, aproximadamente a las 14.30 horas, en el contexto de una manifestación pacífica, la víctima J.D.P.O., se encontraba en la intersección de Avenida Libertador Bernardo O’Higgins con Namur, de la comuna de Santiago. En esa época no eran tan frecuentes los disparos de los funcionarios policiales, por lo que la víctima se ubicó a una distancia de 15 metros de un piquete de Fuerzas Especiales.

Cerca de ella, había un grupo de fotógrafos mirando como los manifestantes que venían desde el norte y sur de Avenida Alameda, se aproximaban al piquete de Carabineros de Chile, con la finalidad de encerrarlos y pedirles que se retiraran de las cercanías de Plaza Baquedano. Fue en ese contexto, en que la víctima J.D.P.O., escuchó los primeros disparos, se dio inmediatamente vuelta con la finalidad de alejarse del lugar, cuando sintió el impacto de un perdigón en su mano izquierda. Al instante escucha a una de las fotógrafas gritar “¡me llegó un perdigón, me llegó un perdigón!”. Se da vuelta para asistir a aquella mujer, y ve que tiene todo el rostro ensangrentado. En ese momento, el miedo hizo que la víctima se paralizara.

Debido al dolor que sentía, la víctima se puso en cuclillas y comenzó a llorar. En dichas circunstancias un hombre desconocido la tomó del brazo y le ayudó a alejarse del lugar, al tiempo que gritaba “¡que venga alguien de primeros auxilios!”. Fue así como, caminando por el Pasaje Namur, se sentaron en la entrada de un edificio residencial, lugar en el que piquete de la Cruz Roja le realiza las primeras curaciones y le da agua con azúcar. Una vez repuesta, y con mucho miedo, se dirigió a su domicilio.

Con fecha 22 de octubre de 2019, la víctima J.D.P.O., se dirigió al Hospital Barros Luco, lugar en que quedó hospitalizada hasta el 29 del mismo mes. Lo anterior debido, a que el Hospital contaba con la mitad de trabajadores habituales, debido a un paro en el que se encontraba el establecimiento asistencial. Por lo que un procedimiento que podría haber sido de una hora, implicó que por falta de capacidad la víctima tuviera que permanecer en dicho lugar. En dicho lugar, la víctima fue diagnosticada de “herida mano izquierda por balín”. Como tratamiento se le realiza aseo quirúrgico y extracción del balín. Asimismo, se le da el alta, debido a la buena evolución post operatoria.

Los hechos descritos dan cuenta de una agresión injustificada realizada por funcionarios de Carabineros de Chile, quienes actuaron fuera del marco permitido por la Ley y por los Protocolos que regulan el Uso de la Fuerza.