Hombre Chileno 30 Años

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  • Institución del querellado
  • Carabineros
  • Delito investigado
  • Apremios ilegítimos
  • Lugar del evento
  • Santiago
  • Fecha del evento
  • 28-10-2019, 14:20 hrs.

Relato de la querella

El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) ha tomado conocimiento que el día 28 de octubre de 2019, a las 14:20 horas aproximadamente, en la intersección de Avenida Libertador Bernardo O’Higgins con calle Miraflores, comuna de Santiago, la víctima Diego Alberto Gómez Espinoza se encontraba participando de una manifestación ciudadana, junto a otras personas en la acera norte de dicha ubicación.

En tales circunstancias, llegó hasta el lugar un grupo de 8 a 10 funcionarios de Carabineros de Chile, quienes se posicionaron en la acera sur y empezaron a disuadir la concentración mediante el uso de carabinas lanza gases. Al principio lanzaron los cartuchos lacrimógenos hacia el aire, pero después, según refirió la víctima, usaron estos elementos disuasivos como “balas” (sic), en referencia a que apuntaban directamente a las personas con tal armamento, lanzándolos como objetos contundentes, quienes empezaron a correr y huir del lugar.

Instantes después, la víctima sintió un impacto de un cartucho lacrimógeno entre su cuello y hombro izquierdo, sintiendo mucho dolor, cartucho que vio en el piso. Al respecto, la víctima manifestó: “creo que (fue) un disparo intencional, por la distancia y la exactitud del proyectil, afortunadamente no impactó en mi cabeza” (sic), en circunstancias que los Carabineros estaban a unos 20 metros de distancia aproximadamente de su persona.

Inmediatamente, la víctima se desplazó unos metros hacia Plaza Benjamín Vicuña Mackenna, donde recibió ayuda de las personas que se encontraban en el lugar, ya que sentía mucho dolor y la zona afectada se estaba empezando a inflamar. Luego, se alejó del lugar y fue atendido por una brigada de salud que se encontraba en la calle, quienes también lo ayudaron, para después ir a su domicilio. Finalmente, cabe consignar que la víctima refirió haber sentido mucho dolor e inflamación los tres primeros días, y que la lesión sanó completamente luego de siete días aproximadamente.