Relato de la querella
El día 12 de noviembre del año 2019, la víctima en compañía de algunos compañeros de trabajo, luego de su jornada laboral, concurrió hasta el sector Plaza Italia, con el objetivo de manifestarse. Uno de los miembros del grupo, específicamente don C. A., en un momento se separó de sus compañeros por lo que don J. en compañía de don C. V., concurrieron en su búsqueda, caminado en dirección a Avenida Vicuña Mackenna. A las 18:00 horas aproximadamente, la víctima y don C. se encontraban en la intersección de Avenida Vicuña Mackenna con calle Carabineros de Chile, en la vereda norponiente, cuando comenzaron a escuchar disparos provenientes de 30 metros de distancia aproximadamente, desde el lugar en el que se encontraban. En dicho contexto, mientras caminaba, don J. fue impactado por un perdigón en el ojo izquierdo.
Luego del impacto don J. fue trasladado hasta calle Reñaca con Avenida Vicuña Mackenna, lugar en el que se encontraban voluntarios de la salud, quienes lo revisaron y le indicaron que debía concurrir a un Hospital de forma inmediata.
Posteriormente, don J. fue trasladado hasta la Ex Posta Central, sin embargo, en el Hospital no fue atendido en alrededor de veinte minutos, aun cuando su estado era grave, por lo que, quien era su pareja en ese entonces, doña K.A.G. D., lo trasladó hasta la Clínica Santa María. La víctima ingresó a la Clínica Santa María a las 20:00 horas aproximadamente y debió ser operado de urgencia alrededor de las 23:00 horas, para extirparle el perdigón que se encontraba incrustado en su ojo izquierdo. Luego, los médicos le indicaron a don Julio que el globo ocular de su ojo izquierdo había explotado perdiendo completamente la visión del mismo, sin posibilidad alguna de recuperación. Asimismo, el médico le indicó a don J. que debía extirpar el globo ocular, pues de lo contrario podría verse afectado su ojo derecho. Cabe agregar que don J. presentaba, previamente al acaecimiento de estos hechos, una enfermedad denominada ambliopía –conocida coloquialmente como ojo perezoso- que supone que su ojo derecho no desarrolló correctamente la visión, por lo que, de aquel ojo podía ver tan sólo un 45%.
Luego de la operación, la víctima debió asistir, por alrededor de un mes, a tratamientos y curaciones, a la Clínica Santa María. Posteriormente, don J. presentó una complicación, ocasionado por el desprendimiento del implante de su ojo, lo que significó que el día 13 de diciembre del año 2019, debiera ser nuevamente intervenido quirúrgicamente en la Clínica Pasteur.