Institución del querellado
Delito investigado
Lugar del evento
Fecha del evento
Relato de la querella
El día 1 de febrero del presente año, B.J.L.R. se encontraba participando de manifestaciones en el sector de la Bonilla, específicamente en las cercanías de la Subcomisaría Norte, en la Avenida Óscar Bonilla con calle Julio Montt, ello alrededor de las 20:00 horas, cuando una lacrimógena llega al lado suyo, a aproximadamente un par de metros de distancia, moviéndose él rápidamente para devolverla, instante en que su polerón queda atrapado en trozo de alambre que sobresalía de una pared, impidiéndole moverse.
Mientras B.J.L.R. intentaba zafarse, un carabinero logra darle alcance, abalanzándose sobre él y propinándole un golpe de puño en la cara, en la zona sub y supra orbital de su ojo derecho. En el intertanto, llega al lugar otro efectivo quien vuelve a golpearlo en la cara, específicamente en la mejilla y que le toma por los brazos para detenerle, acercándose entonces un tercer efectivo quien le da un golpe de pie en la zona del plexo solar.
Ya detenido, es llevado por los mismos efectivos hacia otro sector en que había mayor contingente, todos quienes comienzan a propiciarle nuevamente golpes de pies y puños, además de golpes con bastón retráctil. Fue golpeado durante todo el trayecto hacia la comisaría en la zona de la espalda, espalda baja y costillas.
Al llegar a la comisaría, solicita que dejen de golpearlo pues es menor de edad, respondiendo frente a ello uno de los funcionarios presentes indicando que “le importa un pico(sic)”, el intercambio propicia que lleguen alrededor de 7 a 8 carabineros a golpearlo, quienes le dan golpes de pie en la cara, cabeza, espada y abdomen, mientras le espetaban que “dejara de huevear (sic)”, “que no gritara”, al proseguir los golpes, B.J.L.R. cae al suelo y adopta posición fetal para intentar resguardar principalmente la zona de su cara que había recibido mayor daño, pero los efectivos continúan con los golpes. Minutos más tarde llega al lugar otro efectivo policial quien le dice a los otros que no le peguen más a B.J.L.R. porque es menor de edad. Único momento en el que se detienen.
Ya trasladado al calabozo, es amenazado por un carabinero, quien mantenía su rostro cubierto por un pasamontañas y quien comienza a decirle cosas como: “¿Qué pasa si te disparo?”, “No me pasaría nada, porque esta es la comisaría y a las lacras como tú hay que matarlas”, “te voy a pegar un balazo (sic) en la pierna y te voy a dejar acá”.
Al ir a constatar lesiones al Centro Asistencial Norte, conforme relato, carabineros quienes lo trasladaban le dicen que si no indica que le llegó una piedra y un botellazo en la cabeza lo «cargarían» por porte de molotov y que “si salía libre tenían su domicilio en el libro de registro e iban a ir por su familia”. Al retornar a la comisaría se burlan de él con frases como «quedaste feo», «quedaste como el pico».
Al día siguiente pasa a control de detención por amenazas a carabineros. Y concurre posteriormente con su padre a constatar lesiones nuevamente al Centro Asistencial Norte.