Institución del querellado
Delito investigado
Lugar del evento
Fecha del evento
Relato de la querella
La víctima relata que se encontraba participando en una manifestación, aproximadamente a las 00: 30 horas del jueves 28 de noviembre de 2019 en la calle Conrado Ríos, cercana a la Rotonda Tucapel de la ciudad de Arica, cuando repentinamente se vio rodeado por un grupo de aproximadamente quince Carabineros, quienes lo tomaron detenido. Señala haber colaborado con sus aprehensores y no haber puesto ningún tipo de resistencia, estos le doblaron un brazo mientras lo detenían y lo subieron a un bus de Fuerzas Especiales. Al subir se percató que era el único detenido y que en interior además de sus aprehensores había aproximadamente otros cuatro carabineros de fuerzas Especiales.
El bus comenzó a recorrer distintas calles con él como único detenido. Se encontraba sentado en uno de sus asientos mientras uno de los Carabineros se sentó detrás de él. Comenzó a ahorcarlo con sus manos profiriéndole insultos por su participación en la manifestación, impidiéndole respirar hasta que la asfixia le provocó vómitos. Mientras lo estaban ahorcando señala que otro carabinero lo tocaba con la luma en los genitales. Señalo que quiso identificar a los carabineros que lo estaban agrediendo, pero no le fue posible dado que sus rostros estaban cubiertos con pasamontañas y no portaban identificación en sus uniformes. El funcionario que lo ahorcaba también le tiraba fuertemente con sus manos «las patillas» hacia arriba haciendo que se levantara del asiento producto del dolor, llegando a causarle heridas con esa acción. Mientras vomitaba, el mismo sujeto que lo ahorcaba lo golpeaba en la cabeza mientras le gritaba «no te gusta tirarles piedras a los polis». Señala que después de vomitar se desmayó hasta que los mismos Carabineros lo despertaron con golpes y con el movimiento de las patillas.
En su recorrido, el vehículo de Fuerzas Especiales fue recogiendo a cerca de 20 funcionarios que estaban trabajando por toda la ciudad esa noche hasta que se llenó. Señala la víctima que escuchó como uno de los carabineros que iba en el bus le decía a quienes lo estaban golpeando que dejaran de hacerlo, que ya era suficiente. Después de un par de horas llegaron al cuartel de Fuerzas Especiales en calle 18 de Septiembre, lo bajaron del bus y lo subieron a otro carro policial que estaba dentro de la unidad policial, de aquellos conocidos como Zapatillas, donde también era el único detenido. Agrega que conversó y simpatizó con un carabinero de FFEE y este funcionario le dijo que lo cuidaría o protegería para que no lo seguirían golpeando. Luego de haber permanecido una hora aproximadamente en el cuartel de calle 18 de Septiembre lo llevaron a la Tercera Comisaría de Carabineros. Desde ahí se dispuso su traslado al Hospital Regional con el objeto de que le constataran lesiones, lugar en el que señala que prácticamente no lo examinaron corporalmente, tampoco le tomaron la presión y le dijeron que «no tenía nada» con solo verlo y sin analizarlo como corresponde.
Al día siguiente, 29 de noviembre, fue entrevistado por el defensor penal publico Sergio Zenteno, quien pudo observar sus lesiones y las fotografió, luego pasó a control de detención por desórdenes, representado por el defensor penal público, audiencia en la que denunció la tortura de que había sido víctima.