Institución del querellado
Delito investigado
Lugar del evento
Fecha del evento
Relato de la querella
El INDH ha tomado conocimiento de hechos que, según el relato de la víctima, D.I.T.R, acaecieron de la siguiente manera:
El 12 de noviembre del año 2019, a las 22:00 horas, la víctima concurrió en motocicleta a dejar a su amiga de nombre M.G. al Templo de Maipú, ubicado en la calle 5 de Abril. Luego, la víctima se disponía a regresar a su hogar, manejando su motocicleta por calle 5 de Abril y al llegar a Pajaritos, cuando un Carabinero se le acercó y comenzó a insultarlo, sin que hubiese mediado provocación alguna de su parte. D.I.T.R respondió al funcionario policial, increpándolo y le preguntó por qué lo estaba insultando. En ese momento la víctima se percató que se le acercaba un piquete de siete Carabineros para atacarlo, que se encontraban cerca de un kiosco de la calle. Producto de lo anterior, la víctima comenzó a escapar en su motocicleta, avanzando por la calle Cinco de Abril, hasta que se encontró con otro piquete de siete Carabineros aproximadamente, dos de los cuales mantenían escopetas, quienes se encontraban esperándolo en la esquina, bloqueando su paso, en una posición manifiestamente intimidatoria. La víctima debió frenar de golpe su moto y decidió correr, pues los Carabineros se acercaban a él, portando sus lumas, para golpearlo. Finalmente la víctima fue aprehendida por alrededor de quince Carabineros, quienes le propinaron una golpiza de tal magnitud encontrándose en el suelo, con patadas, combos y palos de luma en todo su cuerpo y cabeza hasta que terminaron rompiendo su casco de motocicleta. Luego, los Carabineros obligaron a D.I.T.R a quitarse el casco para golpearlo a cara y cráneo descubierto, mientras lo mantenían completamente reducido, pegándole combos en su cabeza con los puños cerrados mientras uno de los carabineros lo tenía ahorcado del cuello. Junto con golpearlo, los Carabineros amenazaron a la víctima, indicándole: “nos vamos a llevar tu moto” “te vamos a llevar preso”, “te vamos a llevar a dar una vuelta” o bien “te vamos a pegar hasta que nos aburramos”. Además, los Carabineros lo escupieron y lo ahorcaron con una bandera de Chile que él mismo portaba consigo. Posteriormente, los Carabineros procedieron a sentar a la víctima en un paradero de micros ubicado en Avenida Los Pajaritos, donde le pintaron las manos, cara y cuello, con un spray negro para humillarlo. Por otra parte, uno de los Carabineros, amenazó a la víctima con rociarle gas pimienta en sus ojos, solicitando a uno de sus compañeros que le abriera los ojos con las manos, sin embargo él se resistió, por lo que fue nuevamente golpeado y amenazado con la imputación de múltiples delitos, aun cuando él no había cometido ilícito alguno.
La víctima logró identificar a uno de sus agresores, se trata del Carabinero J.F., un hombre de aproximadamente un metro ochenta de alto, moreno, robusto, de pelo negro.
Luego de la agresión la víctima fue trasladada hasta la 25° Comisaría de Maipú. Allí lo revisaron y le hicieron bajarse los pantalones y el bóxer, quedando completamente desnudo en la zona inferior de su cuerpo; D. recuerda que habían otros 8 a 10 detenidos junto a él en las mismas circunstancias, siendo desnudados uno a uno. Luego, fue trasladado hasta un centro de salud donde lo llevaron a constatar lesiones. Finalmente, a las 4 de la mañana la víctima fue liberada, pudiendo retornar a su hogar.
El día siguiente a la agresión, es decir el día 13 de noviembre del año 2019, la víctima concurrió al Servicio de Urgencia de Alta Resolutividad (SAR) “La Estrella”, con el objetivo de constatar lesiones de forma particular.
En el servicio de salud se consignó como diagnóstico lo siguiente (cito textual): “Buenas condiciones generales, se evidencia hematoma en región periorbitaria derecha, contusión en región nasal sin deformidad. Contusión en muñeca y mano derecha, contusión en mano izquierda, contusión y excoriación en ambas rodillas. C/P: tórax simétrico, sin agregados, sin estigma de lesión. Neurológico: vigil, consciente, orientada en tres planos, sin signos de focalización, glasgow, ptos, sin estigma de lesión”
Como consecuencias de la agresión sufrida la víctima mantiene graves secuelas psicológicas, permanentes y muy intensas que el INDH juzga deben ser evaluadas por especialistas. D. refiere que hasta el día de hoy le es difícil relatar a terceras personas lo sucedido. Asimismo, la víctima relata que durante dos semanas luego de la agresión estuvo en estado de shock, con permanentes temblores y crisis de ansiedad, se encontraba nervioso y tenía un profundo miedo cuando veía a un Carabinero. Además, la víctima refiere haber sufrido pesadillas en las que era agredido por funcionarios policiales. D. relata, finalmente, que le es profundamente difícil volver a confiar en las personas.