Institución del querellado
Delito investigado
Lugar del evento
Fecha del evento
Relato de la querella
El día 22 de noviembre de 2019 a las 19:00 horas aproximadamente, en el contexto de las manifestaciones sociales realizadas en la Plaza de Los Héroes de la ciudad de Rancagua, la víctima G.T.V.L., quien presenta una discapacidad física en sus piernas que la obliga desplazarse con dos bastones, presenciaba una marcha de manifestantes que era llamada `De Los bastones’ y en la cual principalmente participaban adultos mayore. Estaba previsto que la marcha sería breve, por ser la mayoría de los participantes personas de la tercera edad. Es del caso que aproximadamente a las 20:00 horas, luego de recorrer algunas calles del centro de la ciudad, la marcha regresó a la plaza, los adultos mayores terminaron su participación con discursos y la víctima se quedó sentarla junto con otras personas, escuchando música que tenía puesta un vendedor de limonadas.
Cerca de las 21.00, llegó carabineros al lugar. Antes que la víctima pudiera incorporarse con ayuda de sus bastones, el vehículo policial lanza-agua, conocido como «guanaco», se puso frente a ella y pese a ser patente su condición de discapacidad física, le arrojó un chorro de agua mientras la víctima intentaba alejarse con gran dificultad, antes que alcanzara a colocarse sus bastones, derribándola con la fuerza del chorro. Un hombre se acercó a ayudarla, pero vehículo siguió lanzando agua en dirección a la víctima impidiéndole incorporarse, siendo auxiliada por voluntarios del piquete de salud.
Instantes después, según refiere la víctima, llegó el vehículo blindado táctico lanza gases, conocido como «zorrillo» y los gaseó, tanto a ella, como a aproximadamente 8 personas más que la rodeaban. Se trataba de un gas muy fuerte, por espacio de 3 a 4 minutos la víctima sintió que no podía respirar, los jóvenes de salud le trataban de poner mascarilla, pero ella les manoteaba porque se sentía muy ahogada y desesperada. Un primo que llegó al lugar, la vio en esas condiciones. Posteriormente, fueron a constatar lesiones en el Servicio de Alta Resolutividad (SAR) Dr. Enrique Dintrans de Avda. Baquedano 626, Rancagua. Inclusive la persona que la atendió se puso a toser, le picaban los ojos y en el recinto tuvieron que abrir las ventanas por la presencia de gas en el cuerpo y ropas de la víctima.
Así, finalmente, las conductas descritas configuran el delito de apremios ilegítimos u otros tratos crueles, inhumanos o degradantes previsto en el artículo 150 D del Código Penal, cometido por funcionarios de Carabineros de Chile.