Hombre Chileno 27 Años

Admisible

Relato de la querella

El día lunes 28 de octubre de 2019, la víctima, se encontraba en horas de la noche en las medianías de la Rotonda Tucapel de la ciudad de Arica en una manifestación ciudadana pacífica en el lugar ya mencionado. Avanzada la noche funcionarios de Fuerzas Especiales de Carabineros de Chile, comenzaron a usar gases lacrimógenos y escopetas antidisturbios contra la población civil con el objetivo de disolver la manifestación, sin respetar el marco de legalidad establecido para el uso de este tipo de armas por parte de agentes estatales, en los procedimientos de resguardo del orden público.

Según su relato, señala que se encontraba en la Rotonda Tucapel manifestándose de forma pacífica junto a otras personas. En particular, señala que están golpeando con una piedra las barandas de la rotonda con su rostro descubierto. Señala haber estado con otros amigos, todos manifestándose de forma pacífica haciendo el mismo ruido en la baranda de la Rotonda. A eso de las 23:30 horas, señala que junto a sus amigos se estaban retirando hacia sus casas, momento en el cual Carabineros ingresó hacia la Rotonda para dispersar con disparos de bombas lacrimógenas y perdigones a los manifestantes que ahí se encontraban. Es en ese momento que los jóvenes, viendo el ingreso de Carabineros de Chile hacia ese sector, corrieron por un pasaje que bordea la ribera del río. En ese pasaje vio junto a sus amigos que se acercaba otro grupo de Carabineros que se dirigían hacia ellos dispersando con mucha violencia a las personas. Señala la víctima que cuando vio a los Carabineros corriendo hacia él, retrocedió para buscar a sus amigos, dando la espalda al grupo de Carabineros. En ese momento escucha el disparo de una de las armas y luego un fuerte golpe en la cabeza producto del impacto de una bomba lacrimógena, luego del impacto, Carabineros no asistió al afectado que había quedado lesionado, logrando salir por sí mismo del lugar. Cuando logró incorporarse de nuevo, fue atendido por el equipo de paramédicos voluntarios que se encontraban en la manifestación asistiendo a los heridos. Los paramédicos le practicaron una sutura y limpiaron la herida provocada por la bomba lacrimógena, dirigiéndose posteriormente al Hospital Juan Noé Crevani en compañía de uno de sus amigos., ingresando con una herida cortante región craneal, lesiones que fueron provisionalmente calificadas como leves. En dicho centro de salud, no registraron el motivo de la lesión ni tampoco le fue tomada la denuncia por los funcionarios de Carabineros que se encontraban en el Hospital ya mencionado.